Estados Unidos puso fin anoche a su guerra más larga, declarada como respuesta a los atentados del 11/09. En sus últimas horas en Afganistán, las Fuerzas Armadas estadounidenses se apresuraron a evacuar a refugiados y a diplomáticos, además de los últimos 300 civiles estadounidenses que habían pedido la evacuación antes del repliegue completo.
Desde que los talibanes volvieron al poder a mediados de agosto, EE.UU. ha extraído de Afganistán a unas 120 mil personas en el mayor puente aéreo de la historia bélica norteamericana.
Los talibanes han dado garantías a la comunidad internacional de que permitirán que aquellos que quieran abandonar el país lo hagan, pero Naciones Unidas ha alertado de una inminente crisis humanitaria sin precedentes.