Bajo la presión de inversionistas y ambientalistas, la compañía petrolera, sigue a los productores de esquisto, al ofrecer datos de emisiones verificados de forma independiente a los compradores que buscan reducir sus propias huellas de carbono ante el cambio climático.
Exxon concretó un acuerdo con la firma de medición independiente MiQ para certificar 200 millones de pies cúbicos de gas natural por día producido en sus instalaciones de Poker Lake en Nuevo México.
Poker Lake fue elegido en parte por tener ya implementadas soluciones tecnológicas para detectar fugas y reducir las emisiones de metano. Exxon está evaluando aplicaciones adicionales de próxima generación en la región para mitigar las emisiones, incluidos los satélites y la inteligencia artificial.